En general, los sociólogos opinan que los medios de comunicación son un reflejo de la actualidad social. Prácticamente en cada hogar, existe al menos una televisión, un aparato de radio, un ordenador…

Solemos estar más o menos pendientes a las noticias; y, en efecto: los medios de comunicación, sus contenidos, sus estrategias para intentar llegar a las audiencias, y el análisis de la publicidad que les sirve de base y sustento, podrían ser unos buenos instrumentos para ver cómo es la sociedad en la que estamos inmersos, cuáles son sus defectos y grietas, y cómo incluso, en ocasiones, pueden fomentar, de manera más o menos consciente, algunas de las “enfermedades” que esta sociedad tiene. Y, claro, entre éstas, está el abuso de drogas.

Los medios de comunicación, que son uno de los principales  soportes sobre los que se asienta la publicidad; y la publicidad misma, suelen generar estados de opinión; proyectar unos valores u otros; pueden incidir en supuestas "bondades" de lo que emiten y/o publicitan; y, a veces, incluso pueden hacernos creer que sus ofertas son el fiel reflejo de la realidad, o de lo que debiera ser nuestra realidad; por lo que, finalmente, tienen consecuencias sobre nuestras emociones, actitudes y comportamientos; en definitiva, sobre nuestra salud.